
Cuando hago sopa la hago a conciencia, preparando hasta 4 ollas para, después, congelarla y disponer de ella cuando me apetece así que suelo acabar con un montón de carne de la sopa que guardo para hacer croquetas y también la uso para la tan socorrida "Ropa vieja".
Esta vez pensé en hacerla un poco diferente y aproveché que me quedaba una lámina de hojaldre para hacer este plato.
Además, como hice unos champiñones para otro plato también los usé en esta receta incorporando los tallos para el relleno y acompañarlo en el plato.
Le dí un aspecto tradicional al hojaldre a base de pintarlo con la salsa de hacer los champis al horno así que ya veis lo bien que aproveché todo lo que tenía a mano.
Ingredientes:
- 1 lata de paté (83 grs. de peso neto).
- Los tallos de los champiñones.
- Algún champiñón de acompañamiento.
- 1/2 cebolla.
- 3 tiras de pimiento rojo, frito.
- 3 tiras de pimiento verde, frito.
- 200 grs de "Ropa vieja" aprox.
- 1 lámina de hojaldre.

Elaboración:
Lo 1º de todo es hacer los champiñones al horno, con un poco ajo- pere a 180º durante 12- 15 minutos.
Mientras se hacen los champiñones (recordad que son para otras recetas) cortaremos los trozos de carne de la "Ropa vieja" en trozos pequeños.
Sofreiremos los tallos de los champiñones junto con la cebolla y, cuando esta empieza a ponerse transparente añadiremos las tiras de pimiento (yo aproveché unas tiras que tenía ya fritas).
Incorporaremos la Ropa vieja y la lata de paté (ni siquiera hace falta que sea un paté maravilloso).
En el tiempo en que toma consistencia esta farsa extenderemos el hojaldre y lo cortaremos en dos pasando el rodillo para dejarlo bien fino.
Colocaremos la farsa sobre una de las láminas y cubriremos con la otra.
Pincelaremos bien con agua para que se quede bien sellado y pintaremos la superficie con el jugo resultante de los champiñones.
Ahora al horno durante 20 minutos o hasta que tenga el tono dorado que mas nos guste.
Al servirlo lo volveremos a pintar con más jugo de champis y le colocaremos las piezas que nos parezca.

Es una forma diferente de aprovechar esa carne sin recurrir a lo de siempre.
¡No os podéis imaginar lo que disfruté planeando este plato el día anterior!.
Y como aún quedó algo de Ropa Vieja la próxima receta también será de reciclaje.
Pochoncicos.