viernes, 29 de octubre de 2010

Borraja con salsa de almendras.


 

Creo que ya, todo el mundo, conoce nuestra borraja aragonesa, tan rica en fibra y minerales.
Es un plato sencillo de hacer y que, con un poco imaginación, puede dar mucho de sí.
Hay que reconocer que eso de comer la borraja, apañada con un poco de aciete de oliva y nada más puede llegar a ser sumamente tedioso, pero para darle ese toque de alegría tenemos el truqui de las salsas.....
La forma de hacerla y limpiarla también tiene su aquel en este plato.
Podemos comerla estilo cosher, como la han hecho, toda la vida, nuestras abuelas y que consiste en cocer la patata y la borraja a la vez, en el mismo tiempo y que queda, para mi gusto, demasiado cocida, o, podemos tener un poco de paciencia e incorporarla a la patata unos minutos después de haber empezado la cocción de esta y, así, nos quedará mas durica y con otra textura.
Yo la hago de las dos formas.
Unas veces cosher y otras más "tiesa".
La cocción de la patata tampoco debe ser muy larga ya que se deshace así que con 20 minutos de cocción será suficiente para que quede cocida y no se deshaga.
Cuando lleva 10 minutos de cocción es el momento de incorporar la borraja, si la queremos un poco más dura y, una vez juntas las dejaremos hacerse otros 10 minutos o 15 si nos gusta la patata un poco más hecha.
Poco misterio más tiene este plato.
Ahora bien......
¡El acompañamiento!.
 

En este caso hice una sencilla salsa de almendras y vino que le dió el toque de gracia al platico.
Resultó una comida de lo más agradable.
Os explico la salsa, tal y como, yo, la hice.

Ingredientes:
- Un puñado de almendras picadas finas.
- 1 cucharada (tamaño café) de harina.
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen.
- 1/4 de vaso de vino blanco.
- 1/2 vaso de agua.
- 1 cubito de caldo de verduras.
- Sal.


Elaboración:
Ponemos a calentar el aceite y, en él ponemos las almendras y la harina para que se tuesten, ambas, un poco.
Cuando la harina adquiere el color que más nos gusta le incorporamos el vino y dejamos que
reduzca un poco.
Seguidamente le incorporamos el agua y la sal y, en mi caso, el cubito de caldo de pollo, que tenía congelado (era sopa de pollo que congelé en forma de cubitos).
Se puede poner, en lugar de caldo de pollo uno de verduras y, así, tenemos un plato vegetariano, que, a su vez, podrían comerlo quienes siguen la comida Halal, si eliminan el vino.
Ligamos bien la salsa y.......
¡Lista!.
Desde luego le da otra cara a este plato, eso no me lo podéis negar.....
Otra manera de comer la borraja para no aburrirte.
Por cierto, esta es otra receta de lo más tradicional, en Aragón, con tantas almendras como tenemos....
¡Es una suerte que nos llegara esta verdura desde allende los mares!.....

Un pequeño consejo.... No limpiéis, demasiado la borraja porque pierde toda la fibra.

Pochoncicos.