Cuando viene la familia a casa siempre es una alegría y cuando se van llega el momento de ver todo lo que se ha quedado atrás y tú ni te habías dado cuenta.
Esta vez, a parte de las ya conocidas sobras del arroz del domingo, he descubierto esta misma tarde algo así como barra y media de pan duro y estas frambuesas que había comprado para hacer algún postre y ahí se habían quedado también.
Si a eso le unes que llevaba varios días acordándome de las tortitas....
¡Tacchan!. Tortitas al canto pero en lugar de harina he usado el pan duro amén de unos "culos" de pan de molde que voy guardando congelado para usar en casos como este (odio esos "culos" pero ni loca los tiro. Salen en otras recetas en las que ni se notan).
Esta es una receta un poco "loca" porque he ido añadiendo cantidades a ojillo dependiendo de la textura de la masa.
- 1 barra y 1/2 de pan duro más 6 "culos" de pan de molde.
- 2 vasos de leche (apróximadamente porque no lo he medido)
- 4 huevos.
- 1 cucharada de aroma de frambuesa.
- 1 sobre de levadura.
- 1 caja de frambuesas.
- 2 cucharadas soperas de azúcar.
Primero he puesto la barra de pan a remojo en leche hasta que se ha ablandado y lo he pasado por la batidora.
Le he añadido los huevos, el azúcar, el aroma de frambuesa y la levadura y vuelta a la batidora.
Lo he dejado reposar como media hora y he empezado a hacer las tortitas usando estos moldes tan graciosos de silicona que tenía desde hace ni se sabe.
Para hacer las tortitas he usado mi plancha tepanyaqui y así me han salido unas 14 tortitas.
Al poner la masa en los moldes ha sido cuando le he añadido unos trozos de frambuesas a cada tortita.
Ya sabéis... cuando empieza a hacer burbujas la masa quiere decir que ya se le puede dar la vuelta.
¡Aquí no se tira nada!!!.
Besicos.
